Tuesday, September 27, 2011


Lunes 4 de agosto de 1961

Gilbertito
Tengo frío; son las nueve de la mañana. Todas las mañanas tiemblo de frío. Cayó nieve y no hay sol, el frío penetra en mis huesos y en mi alma. Me falta mi Gilbertito. La casa está llena de flojos que duermen y comen. Yo soy débil y no resisto el peso de tanta gente. Tú eres mío y me ayudas con tu cariño. Pronto salgo a la calle más sola que nunca y volveré con más frio y más triste. Así he vivido años, fría muy fría y sola. Los meses contigo fueron más buenos que malos. tú me quieres y me comprendes. Ven. Ya veremos cómo se arreglan las cosas entre los dos. Si tú me olvidas será terrible, si yo te olvido, peor. si estamos juntos se puede salvar algo del todo. Es una tontería que no estés en casa. Es fea la casa sin ti.
Yo no quiero recibir comida nada más que una vez al día. De repenteno no comeré nada más. Tengo una rabia con todo, Trabajo poco. Se fue la alegría, se fue por el desierto. La casa de madera está llorando. No tiene sentimiento la guitarra. Estar separados es como estar muertos. Un día me canso y salgo a vivir. He estado muerta años de años. Esclava de trabajo y del país ¡Ven, te digo! despues iremos por el mas y el desierto. la lluvia será dulce. ¿Qué hago sin tus manos feas? No tengo a nadie. Tú tienes a Vitervo. Que venga contigo. Quiero preparar un asao para él.
¡Vengan! les digo. Nunca supe que tenía un amigo en Arica
Te quiere,

Violeta



Wednesday, September 21, 2011

uNOS ojos y una Nueva MIRADA.


Siempre se puede conocer gente interesante. Hoy conocí una mirada interesante...  

“En alguna parte se cruzará una mirada con la mía y 
esa fugacidad será más intensa y duradera que un abrazo. (Jorge Díaz)

Goodbye, you don't call me, you don`t respond to my call.  
Siempre habrá una nueva mirada y yo estaré atenta.


Ascensor "21 de mayo" - Valparaíso.

Tuesday, September 13, 2011


                          Camino a Cogoti  IV Región Chile
Días de soledad son días de vacaciones. Tú eliges. Estar en compañía es tener que enfrentarse a la propia imagen. Disfruto de este tiempo exclusivo para mi, no libre del temor al arrepentimiento, una cosa es un día de soledad y otra cosa es la ausencia eterna de una llamada telefónica. Trato de imaginarme un día de soledad y de arrepentimientos, temo a mi propio cambio. Por ahora, elijo la tranquilidad que me da el silencio. Por el camino me cruzo con la anciana. Es común cruzarse con ella, siempre caminando con su cabeza rapada y su lengua afuera. Al cruzarnos la saludo y ella me sonríe. Mi padre, ¿hace cuánto tiempo que perdimos el contacto?... Por años defendió su soltería, ahora, viejo y enfermo,  ¿sentirá la culpa de habernos perdido?... no hagas nada de lo cual vayas a arrepentirte. La tarde me invita a bajar la cuesta. La calle, llena de gente desconocida, será el  refugio para mi cobardía.